04 diciembre 2007

¿Para qué contarlo..?



No despreciemos la curiosidad. Es un impulso humano de latitud infinita que, como todos, oscila entre lo grosero y lo sublime. Por un lado, lleva a escuchar detrás de las puertas; por otro, a descubrir América.
Eca de Queiroz
En cosas que no te va ni te viene, no seas curiosa en hablarlas, ni preguntarlas.
Santa Teresa
La curiosidad es hija de la ignorancia y madre de la ciencia.
Vico
La curiosidad es uno de los principales componentes del amor; por eso quienes tienen, merced al dibujo, o a cualquier otra disciplina, la facultad de adivinar el desnudo bajo las vestiduras, se enamoran más de tarde en tarde.
Stendhal

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La curiosidad puede ser mucho más que esas ganas irresistibles de saber algo que nos intriga. Todos experimentamos esa sensación de vez en cuando. Es volver voluntariamente a la edad de los porqués. Sentimos la necesidad de saber o, más bien, de no ignorar tanto.
El curioso es una persona que,no acepta medias respuestas, intenta ir hasta el fondo en cada cosa. ***

Anónimo dijo...

La curiosidad mató al gato. Es preferible, en ciertas cosas, mantenerse en la ignorancia. Se sufre menos y no por eso se es tonto. Tal vez sea más listo aquel que no ve tanto que otro que ande siempre curioseando por ahí. Además resulta más intrigante y según en qué cosas, parecer despistadillo que no andar siempre con las narices metidas por todas partes.

intoku dijo...

Yo considero la curiosidad un valor imporante.

En nuestra sociedad repleta y rebosante de información, con Internet al alcance de casi todo el mundo, sin curiosidad, todavía, no existe el conocimiento.

Información no es conocimiento, claro...

FELICES FIESTAS!!!

Intoku.

Científico y Santo www. jmmc2001.blogspot.com

Si lo que quieres contarme puede no ser cierto, no es bueno, ni es útil, ¿para qué contarlo..?”
Sócrates